Foto: Imagen de la Beata María de Jesús
Titular de esta parroquia.
PEQUEÑA
RESEÑA DE LA VIDA DE BEATA MARIA DE JESÚS
María de Jesús, nació en Tartanedo,
(Guadalajara) el 18 de agosto del año 1560. Huérfana de padre, fue educada
cristianamente por sus abuelos paternos en Molina de Aragón.
Desde joven el Padre Jesuita A. de Castro la
encaminó hacia la orden de las carmelitas. Ingresó en el convento de Toledo a
los 17 años, donde vistió el hábito en 1577 y profesó en el 1578.
María de Jesús fue una de las hijas
predilectas de Santa Teresa de Jesús, quien descubrió en ella los dones de
santidad con que el Señor la había enriquecido y le comunicó su propio
espíritu, creándose entre las dos una maravillosa sintonía espiritual. Santa
Teresa la llamaba con cariño "su letradillo"
A pesar de su delicada salud, fue enfermera y
sacristana, maestra de novicias y priora. Practicó las virtudes evangélicas.
En la oración conoció la ternura que Dios
tiene con las personas sencillas en ese ejercicio maravilloso del "tratar
de amistad estando muchas veces tratando a solas con quien sabemos nos
ama", como así define la oración Santa Teresa.
Fue acusada y calumniada y depuesta de su
cargo de priora, penas que llevó con gran caridad y amor. Rodeada de gran fama
de santidad, murió en Toledo el 13 septiembre de 1640. Fue beatificada por el
papa Pablo VI el 14 de noviembre del año 1976.
ESPIRITUALIDAD
DE BEATA MARÍA DE JESÚS
Muchos son los rasgos
espirituales que podríamos destacar de nuestra “Beata María”. Todos ellos son muy
actuales, aunque nos separen en el tiempo algo más de 450 años, ya que el
seguimiento en fidelidad de Jesús no tiene fechas en el calendario que hagan
actuales o no el Evangelio.
Resumimos en estos
cuatro puntos el retrato interior y espiritual de María de Jesús López Rivas:
ü
Ser
siempre generosos con el Señor.
ü
Entregarse
con amor a nuestros hermanos.
ü
Aspirar
a un conocimiento profundo de Cristo.
ü
La
sencillez y humildad instrumentos en nuestro camino de amor.
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