sábado, 30 de septiembre de 2023

NUESTRA PARROQUIA SE HACE PRESENTE EN LA ASAMBLEA DEL PUEBLO DE DIOS.

 

El sábado 30 de septiembre, nuestra parroquia Beata María de Jesús, estuvo presente en el XXIX Encuentro del Pueblo de Dios, convocado por el Sr. Obispo don Atilano y bajo el lema: “levantaos”. Mila, Juan, Ainhoa, María Pilar, Inma, José Ángel y Santy fueron las personas que compartieron, junto a otros miembros diocesanos, esta Asamblea Diocesana.

Tras la acogida, oración y palabras de saludo del obispo, tomó la palabra don José San José Prisco quien nos expuso, como eje central del día, la ponencia cuyo título era. “Asamblea Sinodal e Iglesia sinodal”. Tras la ponencia se abrió un pequeño tiempo para preguntas de los presentes.

Compartir un café, diversos testimonios de jóvenes presentes en la JMJ y la entrega de premios del concurso “Ideas para el sostenimiento eclesial” fue el preámbulo para la celebración de la Eucaristía, presidida por don Atilano.

En este encuentro se han recogido los cuadernos de trabajo para los grupos sinodales. Recordar que nuestro grupo sinodal se reunirá el lunes  9 de octubre a las 18,30 h en los despachos parroquiales.

martes, 26 de septiembre de 2023

SÍ PERO… NO

 

SÍ PERO… NO

Tiempo Ordinario. Domingo XXVI

Aunque las palabras tienen cierta importancia, lo verdaderamente genuino y auténtico es la conducta real. Lo ideal es que haya una coherencia entre lo que mis labios pronuncian y lo que mis acciones realizan. Lo que es “very, very important” en esta vida, no son las apariencias externas sino la actitud interior que se refleja en obras.

Cuántas veces el ser humano dice unas palabras, que desde el punto de vista de las convenciones sociales son irreprochables, pero en el fondo son pura hipocresía. Son palabras huecas y vanas porque no expresan la realidad sino lo que el otro quiere oír. Así entramos en el mundo de las apariencias, de lo políticamente correcto, del “sí pero no”. ¡Ah…! me gustaría que no pensaras, en este momento, sólo en la clase política, sino que te miraras a ti, y contemplaras si tus palabras, deseos, anhelos, creencias y acciones son  “sí pero… no” ó “no… pero sí”

En este domingo XXVI del Tiempo Ordinario (ciclo a) Jesús denuncia la falsedad de las palabras cuando no van acompañadas de coherencia en obras y ensalza al hombre y a la mujer que cumple la voluntad de Dios. Lo que importa, viene a decir el Maestro, no es honrar a Dios con los labios y observar una serie de ritos externos, sino cumplir con aquello que Dios pide. Por ello, esta denuncia, da explicación a por qué los líderes religiosos judíos (sacerdotes, ancianos, fariseos) rechazaban a Jesús, mientras que los paganos acogían el Evangelio.

El evangelio (Mateo 21,28-32)  es la primera de tres parábolas que ilustran el rechazo de Israel a Jesús y la oferta del Reino a los de “fuera” (publicanos, pecadores, pobres…) La parábola de los dos hijos a los que se les propone trabajar en la viña, sólo se encuentra en Mateo. Las otras dos parábolas de las que te hablo son: Los viñadores homicidas (Mateo 21,33-46) y Los invitados a la boda (Mateo 22,1-14) 

Jesús, tras exponer la parábola, provoca, con una pregunta, el juicio de sus interlocutores: «¿Quién de los dos hijos hizo lo que quería el padre? Contestaron: El primero» Con esta respuesta muestran, los sumos sacerdotes y los ancianos, que lo importante no es la obediencia aparente de quien dijo: "Voy, señor. Pero no fue” sino quien cumplió la voluntad del padre, aquel primer hijo que “contestó: no quiero. Pero después recapacitó y fue”

El Señor resume y explica la parábola con estas palabras: «Os aseguro que los publicanos y las prostitutas os llevan la delantera en el camino del reino de Dios» Jesús al dar la explicación de la parábola muestra que lo que han manifestado sus interlocutores se vuelve contra ellos, porque son los sumos sacerdotes, ancianos y fariseos los que dijeron “si” a Dios al aceptar la ley de Moisés, pero su actitud es como la del hijo que dijo si y luego no fue a trabajar. Un “sí” con los labios, pero un “no” a cumplir la voluntad de Dios. El signo más evidente  de este “no” es que se han negado a  acoger la invitación de Juan a la conversión. « Vino Juan a vosotros enseñándoos el camino de la justicia, y no le creísteis; en cambio, los publicanos y prostitutas le creyeron»

Reflexión: No sé qué piensas tú, yo creo que cuando en una sociedad las palabras pierden fiabilidad se deteriora la vida social. Cuando la palabra no es expresión de compromiso, la desconfianza se hace presente, las relaciones personales empeoran, se devalúa el ser humano y aparecen las dudas, los temores, las diferencias, los secretismos… algo no marcha bien en nuestro entorno y, posiblemente, lo deberíamos corregir.

Los creyentes hemos de preguntarnos, con sinceridad, qué significa realmente Dios en nuestro vivir diario. Qué papel protagoniza Dios en la vida familiar, en nuestro trabajo, en las relaciones con los “otros”, en nuestros proyectos e intereses. Creo que deberíamos meditar sobre nuestra fe, si se ha convertido en costumbre o si es motor de nuestro ser y estar en el mundo. Ahora bien, ¿Qué importa nuestro credo, que pronuncia los labios, si en nuestro vivir cotidiano falta realmente Dios? ¿Qué importa, nos dice Jesús en la parábola de hoy, que un hijo diga a su padre que va a trabajar en la viña, si luego en realidad no lo hace?

Las palabras, por muy conmovedoras y hermosas que sean, no dejan de ser palabras. Y reducir nuestra fe a frases, sentimientos o ideas sin coherencia ni implicación en la vida y sin obras, es un recitar fórmulas de fe pero olvidándonos de cuál es la voluntad del Padre. La fe verdadera, a mi entender, es la que viven aquellos hombres y mujeres que traducen en hechos el Evangelio. 

La Palabra de Dios siempre nos está invitando a proclamar la grandeza de Dios con palabras y obras. La primera lectura (Ezequiel 18,25-28) así nos lo recuerda: «Cuando el justo se aparta de su justicia, comete la maldad y muere, Y cuando el malvado se convierte de la maldad que hizo y practica el derecho y la justicia, él mismo salva su vida»… "Obras son amores, que no buenas razones".

miércoles, 20 de septiembre de 2023

INSCRIBIRSE EN LA PARROQUIA PARA EL ENCUENTRO DIOCESANO DEL PUEBLO DE DIOS

 

XXIX ENCUENTRO

DEL PUEBLO DE DIOS

“Levantaos”. Asamblea Sinodal

DIÓCESIS DE SIGÜENZA-GUADALAJARA

-         

-  El encuentro será el sábado 30 de septiembre.

- En el Colegio diocesano. 

- Dará comienzo a las 9,30 horas con la acogida.

- No hay límite de inscripciones para el Encuentro, pero es necesario inscribirse en la parroquia para preparar material. En nuestra comunidad de la Beata María de Jesús, recogemos vuestras inscripciones hasta el lunes 25 de septiembre.

El precio de la comida será de 12 € (se preparará solo para los que se inscriban y pidan comida expresamente) 

- Si precisáis de más información podéis pinchar este enlace que os ofrezco:

https://parroquiabeataguadalajara.blogspot.com/2023/09/convocatoria-la-asamblea-del-pueblo-de.html

martes, 19 de septiembre de 2023

EL DIOS ANUNCIADO POR JESÚS

 

Tiempo Ordinario. Domingo XXV 

No me cansaré de decirte que “Dios es diferente” y que cuando le encerramos en nuestras visiones estrechas y esquemas ajustados, terminamos, casi siempre, por empequeñecerlo, haciendo de Él un Dios a nuestro antojo y apaño, peligroso y sin novedad. Si nos aferramos a nuestros propios esquemas, sin aprender desde Jesús la imagen de Dios, nos elaboramos un “diosito particular” que impide contemplar al Dios Padre que crea novedad, que acoge a todos y que nos llama a la convivencia fraterna. Es peligroso generarte un “dios a tu medida” porque el resultado será un dios poco humano, un dios que mantiene el esquema establecido y un dios que ni crea ni ama la novedad.

En este domingo XXV del Tiempo Ordinario (ciclo a)  vas a encontrarte con el Dios que anuncia Jesús, que siendo amor gratuito, sigue desconcertando y escandalizando a aquellos creyentes que dicen conocerlo perfectamente y no abren ningún tipo de resquicio para aprender el Dios genuino que nos presenta Jesús.

El evangelio (Mateo 20,1-16) nos muestra una escena muy familiar para los aldeanos de Galilea en tiempos de Jesús: unos jornaleros esperan en la plaza para ser contratados por el dueño de una viña. Los contratados a primera hora de la mañana son ajustados “en un denario por jornada”. Hasta aquí todo es normal. Pero el propietario sigue contratando a lo largo del día a otros jornaleros, incluso hasta una hora antes del término de la jornada. Con los nuevos llamados no se ajusta paga precisa, sino que les dice: "Os pagaré lo debido"

Con habilidad la parábola nos va encaminando a preguntarnos cómo se comportará el dueño de la viña con estos últimos, contratados casi al final de la jornada. La respuesta es desconcertante e inesperada, ya que el amo da a todos el mismo jornal, incluso a los últimos. Por ello, los primeros jornaleros protestan, porque no es justo, ya que, una sola hora de trabajo no merece la misma paga que una jornada entera. ("Estos últimos han trabajado sólo una hora, y los has tratado igual que a nosotros, que hemos aguantado el peso del día y el bochorno.")

Lo que le sorprende a los trabajadores de la primera hora es que los favorecidos sean los últimos y no ellos. Es decir, que hayan sido pagados con el mismo salario. No se quejan de una injusticia, ya que se ajustaron en un denario y lo recibieron, sino más bien de la ventaja concedida a otros. Se muestran envidiosos de que otros hayan sido tratados como ellos. Y quieren defender la diferencia, les irrita la falta de distinción del amo para con ellos y que éste sea bueno con otros. Mirada, desde este punto de vista, la parábola nos quiere enseñar cómo nos tenemos que conducir ante la misericordia ilimitada de Dios para con “los otros”.

Probablemente, esta parábola quiere ser respuesta a las críticas que hacían a Jesús sus adversarios por su cercanía a los marginados y pecadores. El Maestro no establece diferencias entre justos y pecadores, cosa que molestaba a los supuestamente justos, sino que su comportamiento se remitía a la misericordia de Dios, que es un patrón generoso con todos. El comportamiento de Jesús, que acoge, manifiesta que la gracia de Dios es puro don y amor gratuito.

Igualmente, esta parábola, iluminó a las primeras comunidades cristianas para descubrir la llegada del evangelio a los paganos y su pertenencia a la Iglesia como cristianos no de segunda división sino de pleno derecho. La parábola muestra que el Reino es un don y regalo inmerecido y es igual para todos. Esto lo expresa bellamente el evangelista con la frase tan conocida de: «los últimos serán los primeros y los primeros los últimos.»

Reflexión: La parábola de los obreros de la viña nos recuerda a los creyentes que con un corazón envidioso no se puede entender al Dios bueno que anuncia Jesús. Si tu mirada es interesada y sólo piensas en tu propio provecho, utilidad o egoísmo, no vas a poder descubrir al Dios Amor. Un Dios que es ternura gratuita para todos los seres humanos no puede ser captado por quienes tienen un espíritu calculador, que sólo están atentos a su propio bienestar. Demasiado grande este Dios anunciado por Jesús para corazones tan pequeños y estrechos

Cada vez que pretendemos utilizar a Dios y apropiarle para nuestro propio provecho, olvidándonos de su bondad para con todos, destruimos la imagen que Jesús nos enseñó de Dios.

Impresiona la frase: “Quiero darle a este último igual que a ti. ¿Vas a tener tú envidia porque yo soy bueno?" Me gustaría proponerte que te dejaras desconcertar por Dios, por su forma de actuar, por su forma de ser y de expresarse, por su bondad y por su generosidad que rompe tus esquemas… Igual descubrirás que como dice la primera lectura (Isaías 55, 6-9) “Mis planes no son vuestros planes, vuestros caminos no son mis caminos… mis caminos son más altos que los vuestros, mis planes que vuestros planes”

domingo, 17 de septiembre de 2023

ACTIVIDADES SEMANALES A PARTIR DEL 1 DE OCTUBRE (incluido) PARROQUIA BEATA

 

LUNES:

  9,30 h: Apertura del Templo. 

11,00 h: Celebración de la Eucaristía.

18,30 h: Reunión de Liturgia (1º y 3º lunes)

18,30 h: Reunión de Sínodo (2º y 4º lunes

MARTES:

  9,30 h: Apertura del Templo. 

11,00 h: Celebración de la Eucaristía.

16,00 h: Limpieza del Templo.

17,30 h: Caritas Parroquial 

MIERCOLES:

  9,30 h: Apertura del Templo. 

11,00 h: Celebración de la Eucaristía.

JUEVES:

  9,30 h: Apertura del Templo. 

11,00 h: Celebración de la Eucaristía.

18,00 h: Oración ante el Santísimo.

19,00 h: Celebración de la Eucaristía.

19,30 h: Ensayo del Coro Parroquial.

VIERNES:

  9,30 h: Apertura del Templo. 

11,00 h: Celebración de la Eucaristía.

12,00 h: Visita a enfermos.

17,00 h: Catequesis de Comunión

17,45 h: Catequesis de Confirmación.

19,00 h: Celebración de la Eucaristía.

19,30 h: Formación Adultos en la Palabra de Dios. 

SÁBADO:

10,00 h: Nuestra Relación con Dios. (1º y 3º por determinar)

12,00 h: Actividades Movimiento Scouts Católico.

19,00 h: Celebración de la Eucaristía

DOMINGO DÍA DEL SEÑOR:

11,00 h: Catequesis de adultos (Quincenal)

11,00 h: Ensayo del Coro Parroquial.

12,00 h y 19,00 h: Celebración de la Eucaristía


DE LUNES A VIERNES ESTARÁ ABIERTO EL TEMPLO

MAÑANA de… 9,30 a 13 h 

TARDE de…. 17,30 a 19,30 h (Excepto los miércoles)

LLAMANDO SAL A DIOS

 

Su padre le dijo: ¿cómo podemos saber de la presencia de Dios en todas partes?

El chico comenzó a recitar las Escrituras Sagradas, pero su padre le interrumpió. Esto es muy complicado. ¿No existe una forma más simple de su existencia?

No, que yo sepa. Replicó el joven.

Y cogiendo a su hijo, lo llevo a la cocina. Allí llenó una vasija con agua y mezcló un poco de sal. Después salieron a pasear.

Cuando volvieron, el padre pidió a su hijo: Trae la sal que coloque en la vasija.

Su hijo busco la sal, pero no la encontró, se había disuelto.

 - Entonces, el padre dijo: hijo, ¿ya no ves la sal?

- No, la sal se ha vuelto invisible.

- Prueba entonces un poco de agua de la superficie de la vasija. ¿Cómo está?

- Salada.

- Prueba un poco de agua del medio. ¿Cómo está?

- Tan salada como la de la superficie.

- Ahora prueba el agua del fondo, y dime qué gusto tiene.

Su hijo la probó y el gusto era el mismo.

- Has estudiado tantos años y no consigues explicar con simplicidad cómo Dios es invisible y está en todas partes.... Llamando “Sal a Dios."

miércoles, 13 de septiembre de 2023

ROMPER ESTADÍSTICAS

 

Tiempo Ordinario. Domingo XXIV 

En esta sociedad nos movemos entre estadísticas y números. De todo lo que nos rodea se nos ofrecen “cantidades”, sabemos cuánto tanto por ciento ha subido la gasolina o la garrafa de aceite en relación al mes pasado, se nos ofrecen números de personas que ejercerán su derecho al voto en próximas elecciones, de las abstenciones e incluso escaños futuros de un lado y del otro. Sobre las vacaciones también recibimos números, cuántos veraneantes y dónde han veraneado, qué zona de España ha recibido más turistas y cuál menos… En el colmo de la numerología que sepas que hacemos estadística hasta en el deporte: goles, penaltis y tarjetas a favor y en contra, número de partidos ganados y perdidos… Parece que donde hay un ser humano y una actividad allí se hace presente una estadística y unas cantidades.

La Iglesia no está exenta de esta modernidad del número. Medimos las celebraciones por la asistencia de fieles y la viveza de la comunidad por la cantidad de bodas, bautizos y comuniones. De la “calidad” poco o nada pero de la “cantidad” en demasía, rayando y sobrepasando los límites normales.

En este domingo XXIV del Tiempo Ordinario (ciclo a)  el mismo Pedro, que una vez más nos representa a todos los discípulos, se olvida de la calidad, poniendo tasa, límites y número al perdón. Se mantiene dentro de una visión casuística y legalista, como los rabinos judíos que proponían cuatro como cifra máxima de veces para perdonar. Jesús romperá estos esquemas y los nuestros, sacará de esta mentalidad del número a los discípulos y nos pondrá frente al Dios que perdona sin fronteras y de forma ilimitada.

Detrás de este evangelio (Mateo 18, 21-35) podemos entrever una experiencia de ofensas personales que amenazan con enfrentar a los miembros de la comunidad y romper la armonía. Pedro, y con él todos los discípulos, somos los destinatarios de una nueva enseñanza de Jesús. Ante una pregunta sobre los límites del perdón («Señor, si mi hermano me ofende, ¿cuántas veces le tengo que perdonar? ¿Hasta siete veces?») Jesús responde que el perdón y la misericordia deben de ser ilimitados «setenta veces siete» Y para ilustrar esta enseñanza se nos propone una parábola.

El mensaje de la parábola lo puedes extraer advirtiendo el contraste existente entre la actitud misericordiosa del rey y la extrema dureza del siervo perdonado. ¿Cómo es posible que a alguien que le han perdonado una deuda inmensa no sea capaz de perdonar una deuda insignificante? En los oídos de los que escuchamos la parábola tiene que resonar la pregunta del rey, que resume la enseñanza de la parábola: «¿No debías tú también tener compasión de tu compañero, como yo tuve compasión de ti?»

Amig@, el salmo responsorial nos invita a recitar en comunidad que: “El Señor es compasivo y misericordioso, lento a la ira y rico en clemencia” Dios nos ama tanto que su perdón es infinito. Sin pedírselo nosotros y sin condiciones Dios actúa con misericordia sin límites; en consecuencia, debemos perdonar a nuestros hermanos de la misma forma y manera que Dios lo ha hecho con nosotros. El perdón a los hermanos no es la condición para que Dios perdone, sino, al revés, Dios nos ha perdonado primeramente, de forma incondicional e ilimitada, y por ello nosotros debemos perdonar. El papel del rey en la parábola es el de Dios, mientras que el siervo perdonado somos nosotros.

Reflexión: Con este evangelio se nos desvela el rostro de Dios que perdona y ama. Se introduce el perdón como cimiento y base de la Iglesia, de la comunidad, para una convivencia en armonía. Es, por lo tanto, una necesidad, para la vida comunitaria, el ser hombres y mujeres que hayamos sentido la experiencia de haber sido perdonados y amados por Dios. El perdón cristiano nace de esta experiencia de misericordia del Padre.

Quien ha vivido en su propia existencia el amor de Dios, manifestado en su misericordia, no puede andar calculando fronteras para el perdón y la acogida al hermano. No podemos poner límites a nuestra misericordia, ni preguntarnos cuántas veces debemos perdonar. Las estadísticas y cantidades, en esta ocasión, están para romperlas.

Te invito, a que no te hagas daño cerrando las posibilidades de conceder el perdón. El odio es como una enfermedad secreta que corroe tu persona y que te roba energías para rehacer de nuevo tu vida. Si no perdonas al hermano su ofensa, a ti mismo te castigas, no al otro. Si te liberas de las ataduras del odio recuperarás la paz y descubrirás la ternura inmensa con que Dios te envuelve día a día.

Un camino se abre a ti, discípulo de esta generación: gusta en tu propia vida el perdón para no vivir “sin entrañas”, como el siervo de la parábola que endurecía su corazón y negaba al otro la ternura y el perdón que había obtenido del rey. Si piensas que el perdón es para débiles estas estrangulando el Evangelio.

sábado, 9 de septiembre de 2023

FIESTAS Y FERIAS DE GUADALAJARA

 

A lo largo de los meses de julio y agosto hemos podido participar en diferentes  fiestas de los pueblos de nuestra provincia. También hay localidades que entorno a la Virgen de septiembre celebran sus fiestas patronales. Nuestra ciudad de Guadalajara, una vez terminados los actos religiosos entorno a la patrona la Virgen de la Antigua, vive sus fiestas y ferias 2023. 

Creo que este tiempo, para el cristiano, es una oportunidad para hacer visible los talentos y valores que se desprenden del Evangelio. Nosotros, los discípulos de Jesús, somos invitados, en estos días, a hacer vida cada una de las palabras del Maestro que han sido reflexionadas en multitud de ocasiones y que se desprenden de los textos evangélicos y de las celebraciones vividas

En la medida de vuestras posibilidades, os animo a participar de la fiesta pero imprimiendo en ella el estilo del cristiano, heredado de Jesús. La alegría, el respeto, la hospitalidad, la convivencia, la tolerancia… tienen que presidir nuestra feria y fiestas para hacer de este tiempo un momento de encuentro, fraternidad y de verdadero compartir.

Igualmente, podemos, a lo largo de estas ferias, hacer tiempo para la solidaridad. Por medio de la participación en diversos vermut solidarios, podemos colaborar con Cáritas y otras Asociaciones de Guadalajara que tienen como fin ayudar a los más desfavorecidos.

Por ello, no despreciemos esta semana de feria y fiesta sino que derramemos, en ella, el espíritu del evangelio por donde nos encontremos. Aprovechemos la fiesta como posibilidad para mostrar los valores del cristiano y construyamos una sociedad rica en amistad universal. Nuestras obras darán un estilo guapo a la semana de fiesta que se abre.

martes, 5 de septiembre de 2023

EL CUIDADO DE LOS PEQUEÑOS

 

Tiempo Ordinario. Domingo XXIII 

Pululan por la sociedad y por las parroquias ciertos personajes que se erigen en seres puros e intachables. Estos, se sienten portavoces de la verdad y se creen enviados por lo divino a denunciar que el “otro” no vive, ni actúa, correctamente. Estos personajillos, fácilmente reconocibles, agoreros de desgracias y catástrofes, falsamente cargan sobre sus hombros los pesos de las dolorosas cruces de quienes, según ellos, no tienen un comportamiento evangélico. Se autoproclaman defensores del dogma, de la moral y de las costumbres auténticamente cristianas. Se empapan de argumentos “fofos”, sin consistencia. En ocasiones, se presentan como los únicos traductores lícitos de mensajes de apariciones marianas, viven envueltos en falsas humildades, no se les puede llevar la contraria y tienen apariencia de corderos.

Estas personas, cogiendo con pinzas el argumento de la corrección fraterna, sin una vinculación autentica de pertenencia a una comunidad de fe (por lo tanto sin saber cómo se camina y cuáles son las prioridades y opciones de vida espiritual) informan, con gestos dictatoriales, qué tienes que hacer para agradar a Dios. Y desde aquí sueltan por sus bocas “lindeces” sin misericordia y con ausencia grave de lo que es el cuidado de los pequeños. ¡Madre mía...! Me acabo de despachar bien a gusto.

En este domingo XXIII del Tiempo Ordinario (ciclo a)  siento que los destinatarios de la Palabra de Dios somos nosotros, los discípulos, y, a través de nosotros, la comunidad. Descubro que las enseñanzas de Jesús insisten en el cuidado de los más pequeños y en el perdón como norma básica de la vida de comunidad. Se nos presenta un modelo de Iglesia, válida para los cristianos de todos los tiempos, que hunde sus raíces en estar atentos a la voluntad del Padre, la fraternidad, el perdón y la acogida de los más pequeños.

Te invito a que relaciones el evangelio que la Iglesia nos propone (Mateo 18, 15-20) con el evangelio del próximo domingo (Mateo 18, 21-35) ya que ambos nos van a ofrecer la respuesta a un problema comunitario: ¿Cómo comportarse con aquellos hermanos que, como la oveja perdida, se han alejado de la comunidad? Dos son los recursos que se nos proponen, por un lado la corrección fraterna, por otro el perdón. Ambas actitudes son imprescindibles para que la Iglesia sea pueblo y comunidad de hermanos. Hoy comentamos los versículos que corresponden a la primera de las actitudes: la corrección fraterna. (vv 21-35)

No pretendas que el evangelio te ofrezca un proceso disciplinar y normativo, sino que me gustaría que lo vieras como un reflejo y aplicación de la parábola de la oveja perdida.

Por ello, creo que debemos empezar toda corrección fraterna desde la búsqueda del hermano alejado con amor y respeto. Esta búsqueda, que es tarea de toda la comunidad, se debe hacer en un clima de oración: «Os aseguro que si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, se lo dará mi Padre del cielo» y reconociendo como decisiva la presencia de Jesús en su Iglesia, porque es Él quien hace que el Padre escuche la oración, es Él quien nos ayuda a tomar decisiones desde la caridad y es Él quien mueve los corazones para buscar al hermano y para que el hermano se reencuentre con el Maestro. «Porque donde dos o tres están reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos»

Reflexión: Jesús nos propone un camino que está orientado al bien del prójimo y a sanar la relación con el hermano, sin buscar otros intereses oscuros y mucho menos el desprestigio y la condena. Curiosamente, se nos pide en el Evangelio que seamos nosotros los que tomemos la iniciativa, aunque seamos los ofendidos “Si tu hermano te ofende ve y házselo ver, a solas entre los dos”

Lo fácil y menos cristiano es desentendernos del cuidado de nuestros prójimos, especialmente de los más frágiles, alejados y pequeños. Los cristianos deberíamos, hoy más que nunca, escuchar la llamada que hace Jesús a corregirnos con caridad y a ayudarnos a ser mejores. Es una invitación del Maestro a actuar con paciencia y sin precipitación, acercándonos, desde nuestra responsabilidad de herman@ y sin juicios, a quien está actuando de manera equivocada.

“Don Perfecto y doña Perfecta no existen” Todos cometemos fallos y errores. Todos tenemos momentos malos y necesitamos poder contar con una nueva oportunidad. ¡Cuánto bien nos puede hacer a todos una corrección fraterna en un momento desorientado de nuestras vidas! Y para ello se necesita, con frecuencia, encontrarnos con alguien que nos ame de verdad, que nos interpele y nos contagie su amor.

Amig@ te recuerdo que tu pertenencia a la Iglesia no es sinónimo de ser socio de un club de fútbol, sino de un discípulo de Jesús que vive su fe en comunidad. Argumento, más que suficiente, para “no endurecer el corazón” (Salmo responsorial) ni ser indiferente.

lunes, 4 de septiembre de 2023

CONVOCATORIA A LA ASAMBLEA DEL PUEBLO DE DIOS, 30 DE SEPTIEMBRE 2023

 
Cartel anunciador del Pueblo de Dios 2023

El próximo año pastoral 2023/24 estará marcado, en nuestra diócesis, por la celebración de la Asamblea Sinodal, etapa central y final de nuestro Sínodo Diocesano. Y también coincidiendo con la fecha de nuestro Encuentro comenzará el Sínodo Universal en Roma. De ahí que el tema central del Pueblo de Dios, de este año, sea la Asamblea Sinodal.

Pero tampoco podemos olvidar los ecos de la Jornada Mundial de la Juventud que nos ayudará a crecer en esperanza y comenzar con nuevo ánimo.

Por lo tanto, os convoco, en nombre del Sr. Obispo, al XXIX Encuentro del Pueblo de Dios que tendrá lugar el 30 de septiembre en el Colegio Diocesano “Cardenal Cisneros” de Guadalajara.

Os presento el horario para este sábado, 30 septiembre:

09,30.- Acogida y reparto de material.

10,00.- Oración y presentación del encuentro.

10,15.- Saludo del Sr. Obispo

10,30.- Ponencia y diálogo: Asamblea sinodal en una Iglesia sinodal (Rvdo. D. José San José Prisco, decano de Derecho Canónico en la Pontificia Universidad de Salamanca y experto para el Sínodo Universal).

11,45.- Descanso.

12,15.- Experiencia de la JMJ Lisboa 2023

13,00.- Entrega de los premios del Concurso de ideas para el Sostenimiento eclesial. 

13,30.- Celebración de la Eucaristía (Se entregará el cuaderno sinodal 4: “Servimos”).

14,30.- Comida.

Os animo a participar a todos los agentes pastorales de nuestra parroquia de la Beata María de Jesús, ya que es una jornada diocesana muy importante, signo de corresponsabilidad y comunión, que a todos nos ayuda e impulsa en las diversas tareas evangelizadoras.

Si queréis participar tenéis que poneros en contacto con el párroco (Santy) antes del 25 de septiembre para ser inscritos.

sábado, 2 de septiembre de 2023

LA PARROQUIA DE LA BEATA MARIA DE JESÚS EN LA NOVENA DE LA VIRGEN DE LA ANTIGUA

 
Foto: Coro parroquial en la novena de la Antigua 2023

Un año más, nuestra parroquia, junto a las parroquias de San Juan de Ávila y San Pascual Bailón, con las que formamos UDAP, nos hicimos presentes en el tercer día de novena a nuestra Señora Virgen de la Antigua, patrona de Guadalajara. El tema que nos unía en comunión, en este tercer día de novena, era: “Proclama la grandeza del Señor”, palabras iniciales del canto del Magnificat.

A las 19,30 h comenzamos la novena con el rezo de la oración del rosario. Los misterios e intenciones a cada uno de ellos, así como el rezo de las letanías, fueron preparados y rezados por diferentes personas de la parroquia Beata María de Jesús. Diego (diácono) Asun, Isabel, Juan, Maribel, Eva y Santy fueron los encargados de dirigir esta oración.

Al concluir el rosario, se dio comienzo a la Eucaristía que fue presidida por Juan Pablo, sacerdote de la Parroquia de San Juan de Ávila, que junto a fieles de su comunidad se encargaron de la liturgia: monición, proclamación de las lecturas, salmo responsorial y preces.

Nos dirigió la palabra en la homilía Antonio, párroco de San Pascual Bailón, quien nos animó a imitar el estilo de María en el seguimiento de Jesús. Un sermón muy emotivo, positivo y rico en contenido para saborear y llevar a la vida: Dios te ama y ese amor lo debemos de proclamar como María lo hizo a lo largo de su historia de vida.

En el presbiterio, junto a Juan Pablo y Antonio, concelebraron la Eucaristía José Ángel y Santy, sacerdotes de nuestra comunidad parroquial. Ayudando en el altar Roberto y Alonso.

El coro de nuestra comunidad parroquial fue el encargado de ayudarnos en la oración desde la música. Inma y Fran como directores y todos los miembros del coro tuvieron una disponibilidad absoluta para hacer de este día de novena un canto alegre y festivo de alabanza al Señor por medio de María.

Concluyó esta celebración con el canto de la salve y el himno a nuestra patrona Virgen de la Antigua.

Pedimos al Señor, por medio de María madre, por nuestra Iglesia Universal y nuestra Iglesia diocesana de Sigüenza-Guadalajara, así como, de forma especial por nuestras parroquias que formamos la UDAP para que sepamos proclamar la grandeza de Dios con nuestras palabras, gestos de alegría y acciones, especialmente en este tiempo de sinodalidad.

Igualmente ponemos bajo el amparo de la Virgen de la Antigua a toda la sociedad y ciudad de Guadalajara. Pedimos que todos vivamos la grandeza de Dios desde actitudes de convivencia, fraternidad y paz. Que abandonando la sensación de enfrentamiento con el que vive y piensa distinto a nosotros, construyamos, desde la acogida, una sociedad misericordiosa, al estilo de Jesús.

Gracias a todos los que hicisteis posible este día de oración y comunión.