En este segundo domingo del tiempo de Cuaresma, hemos seguido construyendo nuestro corazón al estilo del de Jesús. Para ello hemos colocado la segunda pieza del puzle de cuaresma, símbolo de este tiempo en nuestra parroquia, invitando a vivir la actitud de: ESCUCHA LA PALABRA
Nosotros, al igual que los discípulos, Pedro,
Santiago y Juan (que representan a todos
los seguidores de Jesús) hemos sido invitados por el Maestro a subir con Él
al Monte de la Transfiguración para contemplar su gloria y llenarnos de su luz.
No, para escondernos haciendo tres tiendas, sino para que afrontemos, sin
miedo, nuestra vida de discípulos apoyándonos en la escucha de la Palabra de
Dios.
Hagamos silencio en el interior, despojémoslos del ruido que embota nuestra mente y corazón, abramos bien los oídos y hablemos el mismo idioma de Dios, el lenguaje del amor.
En este día, Jesús se acerca, nos toca y nos
dice: No temáis. Yo soy luz en vuestras dificultades.
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